En una nota que pude leer sobre Cubillan hace más o menos 4 días en el Diario Líder, me encontré con que el veterano de ya 34 años esta teniendo una buena temporada como “utility” del pitcheo (relevo largo, corto y abridor ocasional) con su equipo Tigres de Hanshin en Japón; 59.1 inning, 45 ponches una efectividad de 3.03 y sus rivales solo le batean un microscópico 200 puntos de average, en una liga que para muchos es considerada la segunda mejor del mundo.
Recuerdo que Darwin en el año 2004 abandonó los Leones porque el equipo en el que participa actualmente en Japón se lo puso en la cláusula de su contrato para firmarlo en ese mismo año, a su vez, el equipo Caracas actuó con la ley inhabilitándolo por todo el año 2005 en cualquier liga del Caribe por incumplimiento de contrato. ¿Qué paso ahí? ¿Se rompieron completamente las relaciones? Por mi parte no extraño nada a Darwin, siempre lo recordare como uno de los pitcher más inconsistentes que he podido ver en la lomita del universitario, tres días Cuchillan y tres días botando juegos desde el primer día que llego en cambio desde los Tigres de Aragua por Wilkeman González.
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